El turismo es una herramienta para combatir la homofobia
La legislación igualitaria que rige en Argentina fue de la mano de una promoción turística, reconocida por la Organización Mundial de Turismo, como modelo para posicionar destinos dentro del colectivo lgbtiq+ internacional.
El presidente de la Cámara de Comercio LGBT de Argentina (Ccglar), Pablo De Luca, aseguró durante el Congreso Internacional de Turismo Argentino (CITA 2021), que la actividad «es una herramienta increíble para combatir la homofobia», en un mundo donde en mas de 70 países la homosexualidad está de una u otra manera criminalizada.
«Cuando nos peguntan porqué turismo lgbt, respondemos: porque la homofobia existe», dijo el referente de ese colectivo en el sector turismo y hospitalidad, al ofrecer una charla sobre la reconversión en tiempos de pandemia. Y remarcó: «Podemos creer que la homofobia no existe, como nos dicen en muchos países, destinos y ciudades, pero como el racismo, el sexismo y la misoginia, es algo que está muy arraigado culturalmente y que tenemos que trabajar desde la educación y desde la sensibilización».
Once países castigan la homosexualidad con pena de muerte
En uno de cada tres países en el mundo alcanza «con la mera imposibilidad de ser lo que somos y de demostrar nuestro afecto» para ser condenados a pena de muerte (rige en 11 países) o recibir penas de entre 8 años y cadena perpetua (57 países) y alguna forma de condena en los restantes.
En ese sentido, De Luca celebró que en Argentina «vamos a cumplir 11 años de la ley de matrimonio igualitario que fue una bisagra para los derechos de los colectivos lgbtIq+ del país que igualó los derechos de millones de personas sin quitarle un solo derecho al resto de la ciudadanía». «No solo tuvo alcance en las personas lgbtiq+ que viven en el país, sino que como con otros derechos civiles, se hizo extensiva a todos aquellos que pisaron y pisan el suelo argentino», agregó.
Dos leyes argentinas fundamentales
También destacó que «hace muy pocos días se cumplieron 9 años de otra ley maravillosa que vino a reparar la enorme deuda que nuestra sociedad tuvo con las personas del colectivo trans travesti; una ley pionera, modelo en la región y en el mundo, que consagra el derecho a la identidad autopercibida de todas y todos».
Esta legislación igualitaria fue de la mano de una promoción turística, reconocida por la Organización Mundial de Turismo, como modelo para posicionar destinos dentro del colectivo lgbtiq+ internacional.
«Somos un destino lgbtiq+ joven, y uno de los pocos países que para dar la autentica bienvenida a viajeros y viajeros de la comunidad investigamos, nos capacitamos y establecemos estrategias comunes de promoción en un mercado tanto doméstico como internacional», comentó.
La comunidad Lgbtiq+ en el contexto pandémico
En estos tiempos de pandemia, De Luca enumeró la serie de acciones que desarrolló la Ccglar, en la mayoría de los casos junto al Instituto Nacional de Promoción Turística (Inprotur), el sector privado y el académico. «Comenzamos a enfrentar la crisis sanitaria y económica más importante de nuestra historia que nos alcanzó y paralizó miles de agencias, hoteles, establecimientos gastronómicos, aerolíneas, y además puso en peligro cada puesto de trabajo y cada empresa de nuestro sector», expresó.
Entre las variadas acciones realizadas, mencionó la colaboración en la elaboración de protocolos; generación de webinars; participación virtual en ferias internacionales; creación del Día Internacional del Turismo Lgbtiq+; y realización del Masterclass Gnetwork 360.
También, el fortalecimiento de la Red Federal de Turismo Lgbtiq+; la creación del Observatorio de Turismo Lgbtiq+; el apoyo del PLan de Marketing del Inprotur para los próximos 4 años: y el Programa Nacional de Turismo Lgbtiq+ en 23 provincias y el CABA, entre otras acciones.