Mama Antula: La Historia de una Futura Santa Argentina.
Desde Roma, se han dado pasos significativos hacia la canonización de Mama Antula, también conocida como María Antonia de San José, una figura venerada por su trabajo caritativo en Argentina. Aunque la noticia aún no ha sido confirmada oficialmente por el Vaticano, fuentes periodísticas indican que la ceremonia de canonización podría llevarse a cabo a principios de 2024 en la Basílica de San Pedro del Vaticano.
María Antonia de San José, conocida cariñosamente como Mama Antula, nació en 1730 en Villa Silípica, hoy parte de la provincia de Santiago del Estero en Argentina. En una época en que Argentina no existía como nación y era parte del Virreinato del Río de la Plata bajo control español, Mama Antula hizo votos religiosos a los 15 años y se dedicó a la oración y el apostolado.
En 1760, fundó un grupo de mujeres jóvenes que se consagraron a la caridad y colaboraron estrechamente con los jesuitas. A pesar de las dificultades, como caminar descalza durante semanas para llegar a diferentes regiones del Virreinato, Mama Antula promovió ejercicios espirituales en línea con las enseñanzas de los jesuitas. Sin embargo, tras la expulsión de los jesuitas en 1767, continuó su trabajo de caridad en regiones desfavorecidas del nordeste argentino.
En Buenos Aires, Mama Antula intentó establecer un centro de ejercicios espirituales, pero enfrentó oposición de la alta sociedad y el virrey de la época. Finalmente, en las afueras de la ciudad, fundó la Santa Casa de Ejercicios Espirituales, ubicada actualmente en la calle Independencia 1190. Mama Antula falleció en 1799, y sus restos descansan en la Iglesia de Nuestra Señora de la Merced de Buenos Aires.
El proceso de canonización es un camino que implica varios pasos. El Dicasterio para las Causas de los Santos en el Vaticano se encarga de evaluar las vidas de aquellos considerados para la santidad. En 1929, Mama Antula fue declarada Venerable por el Papa Pío XI.
En 2010, el Papa Benedicto XVI aprobó el título de «Siervo de Dios» para Mama Antula, reconociendo sus virtudes heroicas. Luego, en 2016, el Vaticano aceptó el primer milagro atribuido a ella: la curación de una monja con colecistitis en 1904.
El segundo milagro se verificó en 2018, cuando un hombre de Santa Fe, que sufría un derrame cerebral, experimentó una recuperación inexplicable después de que su familia implorara a Mama Antula por su curación. Los médicos no pudieron ofrecer una explicación científica para su mejoría. Con la aprobación de este segundo milagro, el Papa Francisco ha permitido que Mama Antula pueda ser canonizada, un paso que aún no ha sido confirmado oficialmente.
De confirmarse, Mama Antula se uniría a la lista de santos y beatos argentinos, como el Cura Brochero de Córdoba y Artemide Zatti, canonizados por el Papa Francisco. Su canonización sería un momento de profunda importancia para Argentina y una celebración de la fe y devoción que ha inspirado a generaciones.
La historia de Mama Antula es un testimonio de compasión, servicio y dedicación a los más necesitados, y su legado perdura en la memoria y el corazón de aquellos que la consideran un faro espiritual. La confirmación de su canonización en 2024 sería un evento de gran significado para la iglesia y la comunidad en Argentina y en todo el mundo.