La Rioja: Sesión de la Legislatura provincial
La oposición pretende transformar un gesto ejemplar de legisladores en una crisis institucional.
Como es costumbre en la oposición, se magnificó un hecho político sucedido en la Legislatura provincial a raíz de la presentación de un proyecto del bloque del PJ, proponiendo que los legisladores donen la mitad de su sueldo por este mes y que, con el 50% de los recursos que percibe mensualmente la Cámara, se realice un aporte por tres meses para solventar al sistema sanitario que, como en otras provincias, está amenazado de colapsar.
Si bien el debate fue áspero, porque también, en el orden del día se inscribió el proyecto de designación de jueces y otros proyectos que generaron polémicas, se optó por convocar a una sesión especial para tratar los dos temas mencionados.
Finalizada la sesión, cierto sector operador de prensa opositora de la provincia, avanzó en los medios nacionales tratando de instalar en la opinión pública que La Rioja está viviendo una grave crisis institucional.
En honor a la verdad, nada de esto está sucediendo. La estrategia de colocar a la provincia en una situación de caos, instrumentada desde la cúpula del PRO a nivel nacional, está motivada por el pedido de juicio político que tomaron estado parlamentario, tanto en la Legislatura, en contra de Gustavo Galván, como en el Concejo Deliberante, en contra de la intendenta de la Capital, Inés Brizuela y Doria; y el viceintendente Guillermo Galván. Tras haberse filtrado mensajes en los que instigaron la movilización de supuestos comerciantes a escrachar al gobernador en su propio domicilio, violando todas las normas de seguridad sanitaria durante los nueve días de restricción absoluta establecidos por el gobierno nacional.
Este nuevo episodio de confrontación, generado en el seno de la Legislatura provincial, es una cuenta más en el largo rosario de operaciones que, con la participación activa de los medios y cuando se puede del Poder Judicial, instrumenta sistemáticamente la oposición, no solamente en nuestra provincia sino en todo el país.
Percibimos una velada intención de transformar a la provincia de La Rioja en una nueva Formosa, tras el frontal y mendaz ataque sufrido por el gobernador Gildo Infran meses atrás, y que continúa hasta el día de hoy. Lo que tienen en común Isfran y Ricardo Quintela es que son dos gobernadores profundamente peronistas y que cuentan con el inquebrantable apoyo de los sectores populares en todo el territorio.
