Limón anuncia que el Premio Iberoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez aumentará a 25.000 euros en 2024
La presidenta de la Diputación de Huelva, María Eugenia Limón, ha presentado este miércoles en Madrid la 43 edición del Premio Iberoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez en Casa de América y ha destacado la «firme apuesta» de que sea el premio de referencia de las letras iberoamericanas, toda vez que ha recalcado su compromiso de «convertir el premio en el mejor dotado en lengua castellana en el mundo, para que sea la referencia de las letras iberoamericanas».
En este sentido, ha recordado que si en 2019 la dotación eran 6.000 euros, en la presente edición se han alcanzado los 20.000, y en 2024, el premio ascenderá a 25.000 euros.
Este acto-homenaje a la figura del Nobel de Moguer ha contado, además, con la presencia del alcalde de Moguer y vicepresidente de la Fundación Zenobia-Juan Ramón Jiménez, Gustavo Cuéllar; Carmen Hernández-Pinzón, sobrina nieta del Nobel onubense, y Enrique Ojeda Vila, director general de Casa de América, según ha indicado la Diputación en una nota de prensa.
Asimismo, Limón ha enfatizado la dimensión iberoamericana del galardón, «que goza de una inmejorable salud», apuntado que «en los últimos dos años se ha doblado la participación, pasando de 500 a 1.000 obras presentadas».
Por su parte, el alcalde de Moguer, haciendo referencia al legado de Juan Ramón, ha señalado que «en cada una de sus palabras destinadas a nuestro pueblo, nos dejó una gustosa obligación que tenemos que cumplir» y ha afirmado que «la esencia del poeta sigue impregnada en sus calles», asegurando que «igual que los musulmanes tienen el Corán, y los cristianos la Biblia, los moguereños tienen Platero y yo. Moguer va en nuestro ADN».
Carmen Hernández-Pinzón ha destacado «la importancia de este premio para ayudar a los autores a darse a conocer, igual que hizo Juan Ramón, entre otros, con los poetas de la generación del 27». La sobrina nieta del poeta ha recordado también como éste, cuando vivía en América, «necesitaba alimentarse de sus raíces y de su entorno», dejando como resultado «una obra impregnada de su tierra».
A continuación, los poetas Elena Medel y Alejandro Simón Partal han establecido un coloquio sobre la figura del poeta universal. Simón Partal ha destacado que «ser poeta es una forma de estar en el mundo, de no pasar de puntillas por la vida» y ha explicado que uno de los lemas juanramonianos que transmitía a sus alumnos universitarios es que «escribir es desaparecer».
Asimismo, ha añadido que «en su poética, otro de los dogmas es que no hay que carpintear el poema, hay que ir a la esencia, a lo elemental», concluyendo que «la poesía o es buena o es indiferente».
Elena Medel ha descrito a Juan Ramón como «un poeta que vuela alto, pero al mismo tiempo tiene los pies en la tierra», y ha puesto en valor «el andamiaje de su escritura, en la que hay una presencia en todo momento de quien va a leer esos poemas». Para Medel, sus versos son «un taller de escritura inagotable».
Además, la poeta y editora ha hecho referencia a la labor del Nobel como editor que «miraba al futuro pero también al pasado. Invita a leer a quienes vienen, pero también a aquellos de quienes venimos». Cerró el acto la actriz Aída Folch recitando Nostalgia, de Juan Ramón Jiménez.